Page 3 - Mujeres cumpliendo sueños - Revista
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“Yo le pongo amor


         al campo, le pongo



         amor a la tierra”                                                 Luz Marina

                                                                             Dávila Gallego
          Por: Ana María Flórez Bueno










                       Café La Riqueza               Finca El Retiro - Vereda El Hogar




                 Luz Marina jamás se imaginó vivir en el        Hoy junto a su familia tienen 5.000 palos de
                 campo. Era una mujer de negocios, tenía una    café que cuidan con amor y dedicación. El
                 fábrica de calzado, almacenes, trabajadores y   café lo venden en grano, pero están
                 vivía en pleno centro de Pereira. Pensaba que   trabajando para que lo más pronto posible,
                 vivir en una finca era una vida muy solitaria.   puedan comercializarlo ya procesado bajo la
                 Sin embargo, cuando llegó la pandemia todo     marca: La Riqueza café de origen.
                 cambió. La cuarentena se alargaba y lo más
                 conveniente era irse para la finca de sus       Luz Marina es espontánea, conversadora,
                 suegros en donde  conoció sus nuevos           dice lo que piensa. Equilibra la sencillez del
                 grandes amores: el café y el campo.            campo con su estilo femenino y glamuroso.
                                                                Se levanta todos los días a las 5:30 de la
                 Así pasó de ser una mujer de ciudad, a         mañana, toma su café, les da el desayuno a
                 convertir la tierra en su proyecto de vida. “De   las gallinas y empieza a distribuir las tareas en
                 la finca me apasiona el café, los paisajes, la   casa, donde todos colaboran.
                 paz. Además, la gente es una belleza. Aquí la
                 gente saluda, en la ciudad eso no se ve.       Cuenta que encontrar mano de obra para la
                  Cuando voy  a la ciudad me estresa la         tierra está difícil, “nadie quiere ya trabajar en
                     ‘carramenta’ y la aglomeración de gente”   el campo y si nosotros  no producimos
                     afirma con seguridad.                       comida, en la ciudad no pueden comer”.
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